Paz.

Bueno, luego de dos semanas de tremenda tristeza, desesperación, drama, y confusión... vengo para decir que estoy bien. Pareciera que escribo nada mas que cuando estoy muy mal, o muy bien. Asi que les vengo a dar paz: les vengo a dar la paz, de que estoy en paz.
Bah, a ustedes no les cambia nada. Este es un blog enteramente catártico, y sin sentido en la red global de computadoras (recordaré poner esta frase en mi curriculum).
Estoy en aquél momento de la vida en que nadie quiere tener nada conmigo, nadie me quiere de alguna forma emocionante y linda; y que yo estoy totalmente solo y confundido. Sí, y a pesar de eso, estoy bien. (No lo malinterpreten en sentido de amistad. Con mis amigos estoy más que bien. El planteo es meramente romántico. Tampoco lo malinterpreten como que no quiero nada con nadie, es el mundo el que no quiere nada conmigo.)
A pesar de todo, hoy encontré la paz. No sé si habrán sido los mates con mi amiga, o porque finalmente aprendí a respetarme a mi mismo. A conservar la dignidad, y querer ser feliz. ¡Quiero ser feliz, por favor, vida!

Igual, sí, gente...

...Salí de Guatemala,

Y entré a Guatepeor...

...O no.

No sé...

...El tiempo lo dirá.